Las dunas de arena "canturrean" en algunas zonas del planeta, y sus "melodías" –siempre un sonido bajo, similar a un zumbido- ha despertado la curiosidad del ser humano durante siglos. Marco Polo habló de ellas, y también Charles Darwin en su Viaje del Beagle. El sonido es un canturreo suave en una frecuencia equivalente a la mitad inferior del rango musical de un violoncello. Solo se escucha este sonido cuando la arena se desliza por sus laderas. Y cuando el viento provoca avalanchas, se oye una especie de "coro".
En un nuevo estudio científico para explicar el fenómeno, un equipo de físicos de la Universidad Diderot en París (Francia) han demostrado por primera vez que una misma duna puede emitir notas musicales diferentes. Usando grabaciones tomadas en Marruecos y en Omán, identificaron un rango de notas concretas propio de cada duna. Por ejemplo, en las arenas de Oman se detectó un rango de nueve notas, del Fa al Re, tal y como anuncian los investigadores en la revista Geophysical Research Letters. Los científicos también comprobaron que el tamaño de los granos de arena podría influir en la intensidad del sonido y el tono. Y que cuanto más varía el tamaño de los granos de arena en una misma duna, mayor es el rango de notas que se produce.
Fuente: @muyinteresante
No hay comentarios:
Publicar un comentario